Asalto a cara descubierta en Lota

Una agresión criminal contra el mejor jugador de SS.CC a solo 30 segundos de iniciado el partido, fue el comienzo de una serie de irregularidades en todo el encuentro. El arbitraje “manejado” por parte del señor Olave preferentemente y su colega Arroyo, hace cuestionar a clubes e instituciones series y de prestigio como Sagrados Corazones si vale o no la pena, ingresar a la Dimayor.

Finalmente SS.CC perdió el partido por 4 puntos en los 16 últimos segundos, teniendo inclusive la posición de balón para ganar cuando estaban igualados a 63. Pero, a raíz de los hechos y de la forma en que se desarrollo el partido, para SS.CC el resultado final poco importaba. Ya sea ganando o perdiendo, porque el juego fue ensuciado de tal manera por el local y los árbitros, que escapan a las pretensiones deportivas de un club nuevo, serio, de prestigio como los viñamarinos.

Detalle de una noche de terror.

La llegada a las 16:55 del equipo de SS.CC al moderno gimnasio municipal de Lota, de poco sirvió para los pupilos de “Pipa” Verdejo. Esto, porque el preliminar termino pasadas las 17:30 horas con lo que nuevamente la cancha no estuvo disponible UNA HORA antes como lo estipula el reglamento. Situación que no es nueva, ya que en varias ocasiones los viñamarinos han debido lidiar con lo mismo.

Con un frío terrible, los visitantes solo dispusieron de 30 minutos para el calentamiento. El juego partió a las 18:00 horas.

¿Premeditación, mala intención o exceso de fuerza?

En el primer ataque de Alemán, el capitán Joaquín Oliver, base y líder del quipo SS.CC sufrió mientras defendía su cesto, una fuerte falta antideportiva que el juez solo marcó como falta. Al ataque siguiente Oliver sale de una pantalla y recibe una AGRESION de puño en el rostro por parte de Julio Becerra.

El jugador viñamarino cae inconsciente al suelo. Afortunadamente los jugadores de SS.CC no reaccionaron en contra del agresor, ya que un golpe así puede desccontrolar a cualquiera. Además de la FUERZA PUBLICA en el recinto ni hablar. Fue tanta la impresión de ver a su compañero en el suelo sangrando que más se preocuparon de verlo que de buscar revancha afortunadamente.

Dos golpes fuertes, con mala intención, al mejor jugador rival, hacen pensar que esto pudo venir desde el banco. Becerra además no es un jugador violento, por ende es poco creíble que le naciera a él golpearlo así. Esperamos que no, por el bien del deporte, del básquetbol, esperemos que solo haya sido una mala actitud en el partido de Becerra, que por lo demás fue expulsado del partido.

Cabe señala que el informe de los árbitros dice: “expulsado jugador nº 4 alemán Julio Becerra por faul descalificador”. ¿Faul descalificador? ¿Es lo mismo que agresión de puño?. Eso se llama MANEJO, porque evidentemente la sanción al jugador no será la misma. Y eso, el MANEJO de los jueces es lo que ha ensuciado la liga por años y al parecer seguirá así.

El jugador viñamarino fue trasladado rápidamente al Hospital de la ciudad. Los paramédicos del recinto se comportaron de manera excelente y muy cordial con el jugador, haciendo todas las gestiones para que fuera atendido de manera rápida. Al constatar de que solo tenia una hinchazón y no fractura, Oliver se reintegro al juego en el tercer cuarto. Pero, sin duda, ya no era el mismo jugador. Estaba con miedo y había perdido la confianza. Es mas, fue él precisamente el que perdió el balón cuando SS.CC tenia la posesión final. Intentando recuperarla la bola comete falta y evidentemente el juez no dudo. Marcó antideportiva ante la sorpresa de los jugadores, del técnico y la directiva de SS.CC que no podían creer tal cobro.

Posibilidad de retirar el equipo de la cancha.

En el transcurso del tercer y cuarto periodo las faltas se sucedían una tras otra. Cada ataque de Alemán, los jueces pitaban falta de la defensa. Ataque de la visita se pitaba camina, falta ofensiva etc etc etc. Fue en esos momentos y ante descalabro que se vivía que los directivos se SS.CC contactaron a Sergio Montoya, para consultarle sobre los riesgos que podían caer si se retiraba el equipo de la cancha. Montoya recomendó que bajo ninguna circunstancia había que hacer aquello, ya que podían llegar sanciones económicas, deportivas y un mal precedente para el club.

Deben saber ustedes, que para que un club llegue siquiera a pensar en esa opción, es porque no existe otro camino deportivo-legal que pueda retribuir el gasto (1.500.000) que significo viajar a la octava región, la ilusión de estos jóvenes deportistas “amateurs” que solo viajan, estudian en el bus, dejan a la familia de lado, por defender a su club y hacerlo de manera leal y sana. Una medida extrema como esa solo se puede entender bajo esas circunstancias.

Como “yapa” las duchas del camarín visitante no tenían agua. Esto, “escapa” a la responsabilidad del local y pudo ser una baja de presión en el sistema, pero fue el punto final a una noche muy lejana a lo que debe ser el deporte, el fair play y el básquetbol chileno.

Para muchos de los lectores de esta crónica y que no apreciaron el partido, esto les puede resultar exagerado. Pero, hay ocasiones en que este tipo de acciones deben hacerse publicas, porque se han repetido en el pasado (jugar en ciudades como Concepción o Talca de visita, sabrán a que me refiero) y seguramente se volverán a repetir en esta liga o en las próximas.

Y son precisamente este tipo de situaciones las que alejan a los clubes SERIOS, RESPONSABLES, como SS.CC de ir a una competencia. Señores como Olave, que se las da de “canchero” bromea y responde insultos de las gradas, conversa con los jugadores y se cree dueño del espectáculo, existen por montones y le hacen mal al deporte y al básquetbol chileno.

A SS.CC le restan tres partidos en casa. ¿valdrá la pena jugarlos?. Si evidentemente que si, por todo el esfuerzo que se ha hecho hasta esta instancia. Pero la sensación de decepción, amargura por lo sucedido la tarde del domingo en Lota, marcara un antes y un después para el club viñanarino.

PRENSA

SS.CC